Gracias, Rogelio...

...por haberte dado una vuelta por estos pagos... no tengo palabras para poder volcar lo que fue esta alucinante experiencia, salvo que volví a casa con toda la intención de tirar por el balcón la TV, el equipo de audio y los CD y DVD de Pink Floyd (no puedo volver a escuchar nada de esto después de la forma en que lo viví en el Gallinero...)